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Las cortinas venecianas de madera permiten tamizar la luz y el sol sin la necesidad de oscurecer la estancia. Acompañadas con cortinas blancas a juego con toda la lencería de la habitación con tejidos de lino y algodón, ofrecen la luminosidad y la paz que la estancia de un niño necesita.

Estas cortinas enrollables para salón cuentan con tejido visillo tratado para su buen funcionamiento. Estas enrollables dan la calidez que proporciona el tejido, dándole al salón un toque moderno y minimalista.

En el salón se ha colocado un panel japonés de 7 vías, en el que se ha coordinado tejido semi lino con tejido técnico, permitiendo que se pueda recoger y abrir en dos direcciones. En la habitación de matrimonio se ha apostado por otro panel japonés pero más pequeño, de 4 vías se hizo con tejido técnico y el mismo mecanismo que el anterior.

En las habitaciones de los niños, se han colocado dos cortinas enrollables screen personalizados con dibujos fotográficos. En cambio en el estudio se ha apostado por un estor enrollable screen más sobrio.

La casa cuenta con ventanas y puertas grandes que permite la entrada de luz y sol, por ello necesitaron colocar cortinas enrollables térmicas en toda la casa, dándoles la posibilidad de dar la cantidad de luz y sol que necesiten en cada ocasión. Además, al estar cerradas les mantiene más tiempo la temperatura óptima.

Los paquetos permiten la entrada de luz y juegan un papel importante en la decoración de la habitación. Estos estores sin varillas son perfectos para estas estancias porque su tejido ligero juega a la perfección con la habitación de un bebé.

La necesidad de este espacio consistía en controlar la entrada de luz y sol durante las diferentes horas del día. Colocamos unas cortinas verticales en el comedor que evitaba la sensación de estar encerrados en su casa, además de conseguir darle un toque moderno al comedor.